Eficiencia de espacio: El puente grúa suspendido maximiza el uso del espacio, lo que lo hace ideal para instalaciones con espacio limitado. Este diseño es especialmente útil en espacios reducidos donde los sistemas de soporte de suelo pueden resultar poco prácticos.
Movimiento flexible: El puente grúa suspendido está suspendido de una estructura elevada, lo que facilita su movimiento y maniobra lateral. Este diseño proporciona mayor amplitud de movimiento que las grúas de desplazamiento superior.
Diseño liviano: generalmente se utiliza para cargas más livianas (generalmente hasta 10 toneladas), lo que lo hace más adecuado para industrias que necesitan manipular cargas más pequeñas de manera rápida y frecuente.
Modularidad: Se puede reconfigurar o ampliar fácilmente para cubrir más área, proporcionando flexibilidad para las empresas que puedan necesitar cambios futuros.
Bajo costo: Un diseño más sencillo, menores costos de flete, una instalación más rápida y sencilla, y la menor cantidad de material para puentes y vigas de vía se traducen en costos más bajos. El puente grúa suspendido es la opción más económica para grúas ligeras y medianas.
Fácil mantenimiento: El puente grúa suspendido es ideal para talleres, almacenes, patios de materiales e instalaciones de fabricación y producción. Ofrece un ciclo de mantenimiento prolongado, bajos costos de mantenimiento y es fácil de instalar, reparar y mantener.
Instalaciones de fabricación: ideales para líneas de montaje y plantas de producción, estas grúas agilizan el transporte de piezas y materiales de una estación a otra.
Automotriz y aeroespacial: Utilizadas para levantar y posicionar componentes dentro de espacios de trabajo, las grúas puente suspendidas ayudan en los procesos de ensamblaje sin interrumpir otras operaciones.
Almacén y Logística: Para cargar, descargar y organizar el inventario, estas grúas ayudan a optimizar la eficiencia del almacenamiento, ya que no ocupan espacio valioso en el piso.
Talleres y pequeñas fábricas: Perfectos para operaciones de pequeña escala que necesitan manejo de carga liviana y máxima flexibilidad, donde su diseño modular permite una fácil reconfiguración.
Según la carga específica del cliente, el espacio de trabajo y los requisitos operativos, los ingenieros elaboran los planos de una grúa que se integre en la estructura del edificio existente. Se seleccionan materiales de alta calidad para garantizar la durabilidad y la capacidad de carga. Componentes como el sistema de rieles, el puente, el polipasto y la suspensión se eligen para adaptarse al uso previsto de la grúa. A continuación, se fabrican los componentes estructurales, generalmente de acero o aluminio, para crear un marco robusto. El puente, el polipasto y el carro se ensamblan y personalizan según las especificaciones deseadas.